Blogia
Mi Capricho

Restaurante PAQUÍN (La Hermida - Cantabria)

Nombre: Restaurante Paquín

Dirección: Ctra La Hermida - Potes (N-611) s/n,  La Hermida - Peñarrubia (39.580 Cantabria)

Telefono:  +34 942 733 520 

Web:

Día: 21 de Septiembre de 2008

Motivo: Reunión de amigos.

Número de Personas: 6

Capacidad: 40 Personas

Servicio: 5.75, Comida: 6.30, Nota media: 6,02

Precio Total: 88,50 € IVA INC. Precio por Persona: 14,75 € IVA INC

Comentario:

 

 

Después de una sesión de barranquismo de lo más espectacular, no sólo por el entorno natural (muy, muy bonito), la diversión inherente (eso del rappel esta bien, pero lo de los toboganes, no os podéis imaginar), sino por la imagen de cinco de ciudad haciendo el gamba, decidimos que había que recuperar energías y disfrutar de la gastronomía local.

 

A este sitio nos trajo el guía de la excursión, un tío muy majo, y con amplios conocimientos de la gastronomía de la zona, de los múltiples sitios donde llenar el buche a buen precio, y con buena comida, que es lo importante.

 

El restaurante es una casa al borde de la carretera, lindante a la iglesia, con una zona de aparcamiento comunitaria en uno de sus costados. Al entrar, nos metemos directamente en el bar, y su izquierda tenemos el comedor (uno de ellos). Los baños están en la planta baja. La decoración es rústica, sencilla, mucha madera. El lugar esta un poco escaso de espacio para mi gusto, pero esta limpio que es lo importante.

 

El servicio es familiar, en el estricto sentido de la palabra, Paquín es el taxista del pueblo, la mujer la cocinera, y la hija quién sirve los platos. Muy agradables, y razonablemente pendientes de ti, especialmente para el fumador del grupo, que después de un record de 6 horas sin fumar consiguió su ansiado premio (mechero incluido).

 

El menú, por que fuimos de menú, consistió en cocido lebaniego para tres (que era primer y segundo plato), sopa de cocido para otros dos, macarrones a la boloñesa para uno, de primero; de segundos, tres de huevos con jamón y patatas, lo otros tres seguimos con el cocido.

 

La sopa, densa, de textura ligeramente aceitosa, espesa, rica, estaba buenísima de sabor, y (por sea caso) tenía fideos que le daban aún más consistencia.

 

Los garbanzos, de los pequeños, muy sabrosos, con bien de berza, y bien de “compaño”… puntas de jamón, tocino, morcilla, carne, costilla, y “borono”. De cantidad algo “cósmico”, no pudimos terminarlo, y mira que lo intentamos. La verdad es que muy rico, merece la pena pedirlo.

 

Los macarrones tenían una pinta estupenda, densos, con bien de carne, y una salsa de tomate  casera. El plato tenía una cantidad importante de pasta.

 

Los huevos con jamón, con patatas caseras, eso es toda una carta de intenciones, las lonchas de jamón dignas de ver, los huevos de gallina de verdad… impresionantes, acompañados con pan de pueblo, una delicia gastronómica. Vale no lo servirán donde Arzak y compañía, pero es verdaderamente enorme el plato.

 

Los postres, correctos, nada del otro mundo, de hecho, nada casero, una pena, por que sería redondearlo todo.

 

Para  bajar la comida, líquido elemento, s saber, el vino de la casa, con casera, como manda la tradición, de los que no raspa, agua de botella, un par de cañas (no muy bien tiradas) y una coca cola.

 

Luego los cafés, decentes, los orujos… curiosos, lo pedimos de miel, y tenía regusto final a ¡¡¡AJO!!!!, la crema de orujo, tenía un sabor más estándar.

 

Conclusión: Un sitio muy recomendable si no buscas el Bulli o similares,  no merece la pena (en principio) la carta, ya que el menú es simplemente estupendo. Las cantidades bastante importantes (como marca la tradición en Cantabria), la calidad media/alta en cuanto a producto, y un servicio acorde al local. Casi como comer en casa.

 

1 comentario

restaurante erotico -

No cabe duda de que la cocina cántabra de una de las mejores, más exquisitas y con una gran variedad de platos. Quiero felicitar a los creadores de este blog por la buenísima información que ofrecen.